Hay inicios —muy pocos inicios—, comienzos y recomienzos, otros comienzos y puntos de partida que son reinicios, que trazan el arco de la trama, la intención y la conciencia, y anuncian el desenlace, que es otro comienzo, un libro.
Entre los siete y trece años mis padres y yo solíamos visitar a mi tía que era monja en el convento de clausura de las Carmelitas Descalzas en mi pueblo.
Las cosas bellas son difíciles de saber
Proverbio griego
Las meninas o La familia de Felipe IV, Diego Velázquez, 1656
¿Por qué las cosas tienen tal o cual nombre? ¿Hay una relación especial entre las palabras y las cosas que refieren? ¿De dónde provienen esos misteriosos acuerdos ancestrales que derivan en las lenguas que hablamos hoy? Con frecuencia se dice que las palabras son máscaras de lo real, designios arbitrarios del aparato lingüístico, nomenclaturas que esconden sistemas de poder erigidos desde tiempos inmemoriales para aclarar a unos y engañar a otros.
La monumental Historia de la sexualidad es tal vez una de las obras más nombradas de Michel Foucault, pero también la más incomprendida; en parte, esto puede tener que ver con los devenires del proyecto, el último de esta magnitud que el filósofo llegó a encarar antes de su muerte en 1984.