La conciencia de un hacker
Hace una semana Tierra Adentro reprodujo La declaración de independencia del ciberespacio escrita por John Perry Barlow y traducida por nuestro redactor Luis Ham. Hoy en Tierra Adentro, seguimos la persecución de los hackers en el ciberespacio, personas como El mentor, autor del manifiesto La conciencia de un hacker, traducido por Diego Durán.
Lo que sigue fue escrito después mi arresto…
La conciencia de un hacker
Por
El Mentor
Escrito el 8 de junio de 1986
Otro fue apresado hoy, está todo en los diarios. “Adolescente arrestado por un escandaloso crimen computacional”, “Hacker arrestado después de un fraude a banco” …
Malditos chicos. Todos son iguales.
¿Pero alguna vez, en sus tres piezas de psicología y sus tecno-cerebros de los cincuenta, han mirado a través de los ojos del hacker? ¿Alguna vez se han preguntado qué lo constituye, qué fuerzas influyen en él, qué pudo haberlo moldeado?
Soy un hacker, entra a mi mundo…
Mío es un mundo que comienza con la escuela… Soy más inteligente que la mayoría de los otros niños, esta basura que nos enseñan me aburre…
Maldito bajo rendimiento. Todos son iguales.
Estoy en la secundaria o preparatoria. He escuchado a los profesores explicar por quinceava vez cómo reducir una fracción. Lo entiendo. “No, señorita Smith, yo no mostré mi trabajo, lo hice en mi cabeza…”
Malditos niños. Probablemente lo copiaron. Todos son iguales.
Hice un hallazgo hoy. Encontré una computadora. Espera un segundo, ¡esto es genial! Hace lo que yo quiero que haga. Si hace un error, es porque yo lo he hecho. No porque le agrade…
O se sienten amenazados por mí…
O piensan que soy un listillo…
O no les gusta enseñar y no debería estar aquí…
Malditos niños. Todo lo que hacen es jugar videojuegos. Todos son iguales.
Después eso pasó… una puerta se abrió a un mundo…corriendo a través de la línea telefónica como heroína a través de las venas de los adictos, un pulso eléctrico es expulsado, un refugio de las incompetencias cotidianas… un tablero se encontró.
“Esto es… aquí es donde pertenezco…”
Conozco a todos aquí… incluso si nunca me han presentado con ellos, o si nunca he hablado con ellos, o si nunca vuelvo a escuchar de ellos otra vez… los conozco a todos ustedes.
Malditos niños. Atados de nuevo a la línea telefónica. Todos son iguales…
Puedes apostar tu trasero a que todos somos iguales… hemos comido cucharadas de comida para bebé en la escuela cuando teníamos hambre de bistec. Los trozos de carne que dejaron escurrir fueron premasticados e insípidos. Hemos sido dominados por sádicos, o ignorados por las apáticos. Los pocos que tenían algo que enseñar nos encontraron como alumnos, pero esos pocos son como gotas de agua en el desierto.
Este es nuestro mundo ahora… el mundo del electrón y el interruptor, la belleza del baudio. Nosotros usamos un servicio ya existente sin pagar, por lo que podría ser muy barato si no fuera manejado por glotones lucrativos, y nos llaman criminales. Exploramos… y nos llaman criminales. Nosotros buscamos más allá del conocimiento… y nos llaman criminales. Existimos sin color de piel, nacionalidad o religión… y nos llaman criminales. Ustedes fabricaron bombas atómicas, pagan guerras, asesinan, engañan, y nos mienten y tratan de hacer creer que es por nuestro propio bien; sin embargo, nosotros somo los criminales.
Sí, soy un criminal. Mi crimen es el de la curiosidad. Mi crimen es el de juzgar a la gente por lo que dicen y piensan, no por cómo se ven. Mi crimen es el de burlarme de ustedes, algo que nunca me podrán perdonar.
Soy un hacker, este es mi manifiesto. Tal vez puedan detener a este individuo, pero no pueden detenernos a todos…después de todo, todos somos iguales.
El mentor