Todo el día los anteojos de sol. Entrevista a Patricio Grinberg
La primera imagen: un niño mirando detrás del cristal de pecera gigante, dentro de ella un hombre-buzo. Casi un libro infantil. Lo abrí con actitud desenfadada, no quise mostrar esa felicidad de niña que recibe una manta llena de retazos de telas de colores bordados por la abuela. No leí nada preciso de primera vista. Seguí la conversación con el libro en la mano como si me hubiese desecho de su presencia. Lo sostuve bien. De regreso a casa, a mitad del camino lo abrí:
verdes los azulejos del baño /// adornos, ventanas y edificios, cuatro segundos cerrando cada dirección /// decirlo descuido, recurso del cuerpo /// celeste una virgen ilustra /// sin ser Manila, inminente futuro ahí
Cuando te sorprendes sonriendo y con un libro en las manos, sientes que la luz de la casa estará encendida por siempre.
Casi ininteligible. La poesía de Patricio Grinberg oscila entre lo inmedito y la mitología de un personaje levitando. La vida desde arriba. La posibilidad del después fincada en un pasado que a pesar del esfuerzo no logra desprenderse. Eres otro, pero en el mismo cuerpo, con las mismas costumbres y los mismos miedos.
Quien lea la poesía de Grinberg no encontrará un poema o libro de poesía convencional. La versificación y el uso del lenguaje son una apuesta por la desubicación y la reelectura de los textos para abtraer la imagen, la sentencia implícita. También existe en su poesía angustia y despesperación, al construir frases casi no frases y ser sucinto en imágenes. En él: la contundencia y la furia.
Aquí la entrevista que le realicé al poeta Patricio Grinberg:
¿Qué es un país?
No sé, una piñata, en el mejor de los casos algo parecido al cuchillo de Lichtenberg (no tiene hoja y le falta el mango).
¿Qué es el bien?
“¿Cómo podría saberlo? ¿Puede ser bueno para los peces lo que es bueno para el mono? ¿Sigue siendo hermosa una mujer atrapada en un gesto de resentimiento? ¿Puede una princesa ser princesa si se aleja demasiado del palacio?”, algo como eso respondió Wang Ni cuando le preguntaron lo mismo.
¿Por qué poesía?
En un comentario etimológico probablemente falso pero del todo afortunado, Pascal Quignard sugiere que las palabras latinas flare -soplar así como se sopla una flauta- inflare, fellare, tienen su origen en la griega phalos, y todas, de alguna manera u otra, suponen infundir energía, cargar la realidad, el ejercicio de otorgarle a la realidad una forma aumentada.
Poesía es una forma rara de intentar hacer lo mismo pero con palabras.
¿Utopía o realidad?
No hay oposición, la realidad es una forma de utopía.
¿Qué es dios?
Entre el nirvana y el samsara no hay ninguna diferencia (Nagarjuna dixit), el nirvana es el samsara y el samsara es el nirvana, la única diferencia entre uno y otro es la forma en que se los experimenta.
¿Eres lo que planificaste ser?
A los nueve yo quería ser camionero.
¿Quién y cómo es tu mejor amigo?
Me resultaría difícil describirlos y no veo ninguna necesidad de nombrarlos.
¿Qué es la izquierda y qué es la derecha?
La mano con la que me rasco y la mano con la que escribo.
¿Cuál es el momento de la Historia que consideras más relevante?
Éste, 9 de noviembre 2013, 9:24 am (medio dormido, la taza de café todavía caliente)
¿Por qué las fronteras?
Para poder hacer sentido cada vez que decimos adentro o afuera.
¿Fama?
La escritura sólo te entrena para la indiferencia.
¿Publicar en Latinoamérica?
Escribiendo se pierde el tiempo, publicando también se pierde dinero. El asunto es perder.
¿Dices soy del sur?
Acá el sur es Tierra del Fuego.
¿Eres libre?
Sí, no, no sé, depende, igual que todos.
¿Qué es una ciudad?
Mucho ruido, una secuencia enorme y aparentemente desarticulada de movimientos y ruidos.
¿Qué piensas de la relación entre poesía y política?
Sólo diciendo política a cualquier manifestación de poder, asignando valor político a cada palabra, pero en ese caso también serían políticas las distintas formas de atarse los cordones de los zapatos y cualquier receta de cocina.
¿Cómo opera la memoria en el espacio de lo poético?
Como algo que intencionalmente se desarticula y se reinventa apenas el artificio poético se enciende.
¿Cómo es la figura de un poeta en el presente?
Ninguna marca particular, un tipo como cualquiera.
¿Qué papel tiene lo poético en la vida cotidiana?
Nada más allá de algunas horas de trabajo, por la noche o por la mañana.
(Si la experiencia poética de pronto abandona el texto ya no es poesía, es otra cosa, es la vida).
¿Qué pasa con el significado en la poesía, ha cambiado su papel en el presente; es relevante?
El significado no es opcional, nunca ningún texto escapa al significado, lo único que cambia son las formas de trabajarlo.
¿La Historia tiene cabida en la poesía? ¿Si es el caso, cómo se da esa relación?
En la poesía cabe cualquier cosa y todo lo que entra necesariamente se deforma. También la historia (y también las leyes de la termodinámica y los patitos de hule, el brócoli, también el porno de los años treinta).
¿Qué es el hogar?
Oikew en griego significa vivir, estar. Oikeiw unir, apropiarse, ganar, ser amigo. Oikos significa casa y lo que es propio, significa familia, fuego familiar, significa templo.
¿Qué es la amistad?
Un pequeño repertorio de gestos vacíos que sólo significan o parecen significar dentro de un mecanismo completamente privado.
¿Qué es el futuro?
Un presente diciendo otro (un presente que todavía no).
¿Eres feliz?
Siempre, aunque pareciera todo el tiempo esforzarme por disimularlo.
**
Patricio Grinberg (Buenos Aires, 1971). Publicó La Jabalina (tsé-tsé, 2002), Manila (Zindo&Gafuri, 2010) y VHS (Zindo&Gafuri, 2010). Es administrador del blog de poesía -y coeditor del sello editorial Zindo&Gafuri.