Tierra Adentro
Cártel de la 55 Muestra de Cine Internacional

El jueves pasado arrancó la edición número 55 de la Muestra Internacional de Cine de la Cineteca. He aquí unos breves comentarios de las películas que ya he podido ver y que se proyectarán en los siguientes días.

Distinto amanecer, de Julio Bracho, con Andrea Palma y Pedro Armendáriz, guión del poeta Xavier Villaurrutia y fotografía de Gabriel Figueroa, abrió la Muestra por los 70 años de su estreno en una copia restaurada. Un clásico del Cine de Oro mexicano.

Fotograma de Distinto amanecer, del director Julio Bracho

Fotograma de Distinto amanecer, del director Julio Bracho

Joven y bella, la cinta más reciente de François Ozon, después de la genial En la casa, es la historia de una joven en el despertar de su vida sexual que sin medir las consecuencias de sus actos se ve envuelta en un suceso estremecedor. Sin duda, Ozon ha madurado mucho como cineasta.

Gloria, esta película chilena cuenta la historia de una mujer madura, separada, con dos hijos ya grandes que, no obstante, busca rehacer su vida al lado de un nuevo amor que no cumplirá con sus expectativas.

Jazmín azul, el nuevo filme de Woody Allen es protagonizado por una extraordinaria Cate Blanchett en el papel de una mujer que luego de ser una de las protagonistas del jet set neoyorquino cae en desgracia y tiene que mudarse al pequeño departamento de su hermana en San Francisco donde hará todo lo posible por volver a conseguir su estatus.

La postura del hijo, una cruda y sorprendente cinta rumana que ganó el Oso de Oro en la Berlinale sobre una madre sobreprotectora que hará todo lo posible por hacer que su hijo no pise la cárcel después de un accidente en el que se ha visto envuelto. Uno de los mejores largometrajes que se presentan en esta edición de la Muestra.

De tal padre, tal hijo, al principio es una historia conmovedora a partir de una equivocación: cuando en el hospital, una enfermera cambia a los hijos recién nacidos de dos familias y, luego de seis años, los padres se dan cuenta de que el hijo que han criado no es el suyo. Por desgracia, la película se extiende más de lo debido y acaba en un lamentable melodrama.

Érase una vez yo, Verónica, es la historia de una joven médica recién egresada que es enviada a un hospital saturado de Recife, lo que la hace tener incertidumbres sobre su profesión y, por el otro lado, sobre la relación con su novio; en esa disyuntiva, en una especie de auto psicoanálisis, ella se cuenta sus avatares a sí misma.

La casa de la radio es un interesante documental sobre Radio Francia Internacional cuya narrativa es novedosa: es un documental sin narrador que vaya contando la historia, pues el propio documental se cuenta a través de las personas que trabajan en esa emblemática estación de radio.

Sólo Dios Perdona, esta decepcionante cinta protagonizada por Ryan Gosling bien podría ser una continuación de Drive si no fuera porque se excede en su morbidez, en la violencia gratuita, la venganza en el sórdido mundo de las mafias y la prostitución de Tailandia.

Amor índigo, esta nueva película de Michel Gondry está basada en una novela de Boris Vian. Actuada por Audrey Tatou, es una comedia romántica con dosis de ciencia ficción y paródicas, como las muy evidentes a Jean-Paul Sartre y el 68 francés.

Restan otras 12 películas de la Muestra que comentaré en una siguiente entrada.