Tierra Adentro
Benavente. Duck Hunt. Acuarela y tinta. 15 x 7,5 cm. 2009.

La semana pasada varios periódicos, The New York Times, The Washington Post y The Guardian revelaron documentos que indican que la Agencia de Seguridad Nacional (NSA) de Estados Unidos, junto con su contraparte británica, habían trabajado durante al menos tres años para vulnerar los protocolos de seguridad de Internet y que este trabajo ya había rendido fruto. Edward Snowden, un ingeniero norteamericano que había trabajado como contratista para la CIA y la NSA filtró los documentos a los medios mencionados desde mayo de este año, pero la revelación de las capacidades actuales de los departamentos de espionaje para vulnerar las comunicaciones protegidas en Internet sólo se hicieron públicas el 5 de septiembre.

De acuerdo al reporte del New York Times:

La Agencia de Seguridad nacional está ganando su larga batalla secreta contra el cifrado, usando supercomputadoras, engaños tecnológicos, órdenes judiciales y persuasión tras bambalinas para socavar las principales herramientas de protección de comunicaciones.

Mientras que el gobierno de Estados Unidos ha justificado sus acciones como esenciales para la seguridad nacional, la comunidad de ingenieros que trabaja en Internet ha hecho un llamado a corregir y endurecer el cifrado en Internet para evitar que estas acciones sean posibles. Mientras tanto, Snowden ha encontrado asilo temporal en Russia y las compañías que el reporte ha revelado vulneradas, como Yahoo y Microsoft, han protestado públicamente la actividad de la NSA.

¿Pero qué implica esta revelación para los usuarios de Internet? Si bien es muy posible que la NSA tenga la capacidad de ver tus conversaciones privadas de Facebook, es muy poco probable que lo haga, y sigue dependiendo de los permisos judiciales apropiados para hacerlo. El problema principal radica en que grupos criminales encuentren las vulnerabilidades creadas por la NSA y las exploten para actividades ilícitas: fraudes de tarjetas de crédito, robo de identidad o extorsión.

Esto ya ha sucedido antes, por ejemplo, cuando un grupo criminal puso escuchas telefónicas en los teléfonos de hasta 100 personas prominentes del gobierno griego en 2004. Para hacerlo, utilizaron el programa que se había instalado para que la policía efectuara escuchas legales. Debido a la naturaleza electrónica del crimen, nunca se encontró a los responsables.

A diferencia del caso griego, las vulnerabilidad es creadas y explotadas por la NSA funcionan en toda Internet y afectan a millones de personas. Conforme una mayor parte de la economía global depende de Internet para funcionar, el daño que simplemente la pérdida de confianza en el comercio electrónico puede provocar es enorme.