Calles vivas, completas y diversas: Pueblo Bicicletero
El Área Metropolitana de Nuevo León comprende los municipios de Monterrey, Guadalupe, Apodaca, San Nicolás, San Pedro, Santa Catarina, García, Juárez y Escobedo. En estos municipios se concentra la mayoría de la población urbana y las fábricas, empresas e instituciones gubernamentales, privadas y educativas más importantes en el estado. Las continuas “mejoras” y reparaciones de las vialidades (que al final son más bien los “cochinitos” de los gobernantes en turno), más el intenso tráfico que se vive casi a cualquier hora son factores de estrés y demás padecimientos citadinos. La ciudad es un caos que nada tiene que ver con el canto glorioso a la urbe que hacían los estridentistas a principios del siglo XX, con aquello de: “Oh ciudad toda tensa / de cables y de esfuerzos, / sonora toda / de motores y de alas”. En este escenario un Colectivo llamado Pueblo Bicicletero (mote que comúnmente expresa de manera despectiva que una ciudad no vive en desarrollo, pero que ahora, de manera ingeniosa, se le da una vuelta de tuerca) se ha montado en dos ruedas y ha salido a las calles para reclamarlas e integrarse en ellas, buscar vías alternas ante la desesperación urbanística de una ciudad que a gritos pide ser reestructurada.
Aquí presentamos una entrevista realizada al Colectivo Pueblo Bicicletero.
Odvidio Reyna: ¿Qué es Pueblo Bicicletero? ¿De dónde nace? ¿Quiénes están detrás del proyecto?
Pueblo Bicicletero: El origen de Pueblo Bicicletero se dio en el 2do Festival de la Tierra organizado por el Colectivo La Bola. Luego, integrantes del Colectivo Frontera Cero convocaron, el 26 de abril de 2009, a una Protesta Rodante con el fin de manifestarse contra la falta de áreas verdes en la ciudad, para conseguir reducir la contaminación, espacios libres de autos, infraestructura para peatones y ciclistas, educación ecológica… ¡por una ciudad sustentable! A partir de esta pedaleada nació el interés de formar un colectivo para promover la bicicleta como un medio de transporte sustentable, a hacer ‘bicibles’ a los invisibles en ciudades construidas para el automóvil. Pedalear por el respeto a la vida, por una ciudad incluyente, por una movilidad sustentable. Somos un colectivo ciudadano y trabajamos en diversas trincheras de forma voluntaria. Somos arquitectos, biólogos, mecánicos, maestros, estudiantes, diseñadores, madres y padres; detrás del proyecto nos encontramos ciudadanas y ciudadanos sensibles a la realidad de nuestro entorno, interesados en hacer de Monterrey una ciudad más accesible.
OR: ¿Cuáles son sus objetivos?
PB: Promover el uso de la bicicleta como medio de transporte y realizar acciones para tener una movilidad sustentable en el Área Metropolitana de Monterrey (AMM).
Generar reflexiones, aprendizajes colectivos y cambios en el uso del espacio público, particularmente de las vialidades.
Aprender a compartir y respetarnos entre todas las personas que nos trasladamos por el AMM, ya sea en vehículos motorizados y no motorizados.
OR: ¿Cómo ven la ciudad desde la bicicleta?
PB: Cuando uno anda en la bici se mantiene en movimiento, en equilibrio. Por lo tanto, se busca que esa inercia se transmita y sea inherente al espacio por el que se mueve. En bici vemos a un Monterrey activo, en proceso de regeneración, o podría decirse de “resiliencia”. Cambiamos de piel para evolucionar en una ciudad más sana, accesible e incluyente.
OR: ¿Qué necesita Monterrey para que haya una mejor convivencia vial?
PB: Como habitantes: sentirnos, escucharnos, acompañarnos. Necesitamos salirnos de nuestra burbuja de metal y concreto y vivir las calles, intercambiar lugares para comprendernos, ser en momentos automovilistas y en otros tiempos también peatones, bicicleteros, gente en transporte público. Cuando pensemos cómo cubrir dignamente el derecho y necesidad de movilidad de mujeres, hombres, familias, ancianos, niños, de todos, entonces aprenderemos a compartir la calle. Pero no podemos hacerlo si no va de la mano con mejoras integrales en nuestra ciudad. Es por eso que es preciso implementar programas de cultura vial, respetar el derecho al espacio público que es de todos y crear o adecuar infraestructura para diferentes formas de movilidad, implementar políticas públicas que repartan justamente el erario público y que beneficien al resto de la población, ese gran 70% que no se mueve en coche particular. Suscribimos precisamente a la campaña del ITDP (Instituto de Políticas para el Transporte y Desarrollo) y Bicired “#77Urbano: lana para la ciudad humana”, en la que se le exigió a la Secretaría de Hacienda impulsar una Política Nacional de Ciudad que permita mejoras en la calidad de vida, sin embargo, peatones, ciclistas y usuarios de transporte público fuimos olvidados en el PEF 2014 (Paquete Económico para el Ejercicio Fiscal 2014). Para una mejor convivencia vial, necesitamos “vivir” primero la ciudad.
OR: ¿Cómo se da la interacción entre ustedes y el resto de la comunidad?
PB: Nosotros somos comunidad, somos parte de esta ciudad. Somos personas moviéndonos. Supongo que el resto de la ciudadanía a la que te refieres es aquella que no usa la bicicleta. En ese sentido, por nuestra parte procuramos mantener una postura franca, reconociendo qué somos entre la marea de personas que también se mueven en coche, en camión, a pie. En ocasiones el camino nos obliga a tomar una actitud a la defensiva, pues es complicado lidiar con automovilistas o camioneros que no están dispuestos a bajar la velocidad. Sin embargo, en general, la velocidad tras el manubrio bicicletero es menor, por lo que es más fácil voltear a ver quién se desplaza a un lado.
OR: ¿Quién puede formar parte de Pueblo Bicicletero?
PB: Quien guste hacerlo. Somos diversos en cuanto a posturas, gustos, ideologías, contextos. Hay quienes usan la bici a diario, quienes sólo como deporte, otros que quieren aprender a pedalear en la ciudad. No hay edades para la bici, menos para el Pueblo Bicicletero. ¡Bienvenidas todas y todos!
OR: ¿Hay más grupos bicicleteros en la ciudad? ¿Cómo es su relación con ellos?
PB: Actualmente hay entre nueve y once grupos en el área metropolitana. La gran mayoría tiene sus inicios en Pueblo Bicicletero. Colaboramos con algunos grupos, tanto en actividades recreativas, culturales, pedaleadas o fiestas, como en gestión pública y relación/asesoría con instituciones educativas.
OR: ¿Cuáles consideran que sean los logros más importantes que hayan tenido a lo largo de su existencia como colectivo?
PB: El logro más grande es que seguimos pedaleando, que somos un grupo cada vez más fuerte y consolidado. Aprendemos constantemente, nos profesionalizamos. Además de las rodadas y las actividades culturales, trabajamos con gobiernos municipales e instituciones educativas para la implementación de acciones y programas de movilidad sostenible que contemplan a la bicicleta, al transporte público y a peatones; tales como el caso de la Ecovía, el proyecto del Distrito Tec, o la red San Pedro Gran Vía, las vías recreativas en San Pedro y Monterrey, y la oportunidad de poder subir la bicicleta al metro. Para más información, se puede visitar la página de Pueblo Bicicletero.
OR: ¿Cuáles son los obstáculos a los que se enfrentan con mayor frecuencia?
PB: La velocidad, la apatía, la ignorancia, el individualismo. Velocidad no sólo de los autos, si no del ritmo al que crece (o decrece humanamente) nuestra ciudad. Apatía por parte de la ciudadanía y el gobierno. Ignorancia que se rinde ante prejuicios y miedos al cambio. Individualismo que no permite ver a la otra forma de vida.
OR: ¿Ser parte de un grupo bicicletero significa una ruptura total con el automóvil o cómo ven al resto de los medios de transporte desde su perspectiva?
PB: Ruptura total sería caer en un juego sin sentido. Nosotros buscamos crear lazos, aprender a compartir. No estamos peleados con el uso del coche, más bien reconocemos que en ocasiones es necesario. El problema en todo caso es el uso desmedido del auto, que es lo que genera altos niveles de contaminación, tráfico, enfermedades. No estamos peleados con nada ni nadie, al contrario buscamos que seamos beneficiados justamente todos. Queremos medios de transporte sostenibles, intermodales, poder mezclar la bici con el metro o camión y tener vialidades de baja velocidad para movernos en coche y poder respetar al mismo tiempo a peatones. ¡Queremos ver calles completas, vivas y diversas!
OR: ¿Cuál es la frecuencia con la que se reúnen y dónde ocurre esto? ¿Organizan rodadas?
PB: Las pedaleadas domingueras de Pueblo Bicicletero son todos los domingos a las 6 pm. Nos reunimos en la Explanada de Colegio Civil, en Juárez, entre Washington y 5 de mayo, en el Centro de la ciudad. En Pueblo Bicicletero nos gusta vincular los recorridos con actividades culturales, musicales, de reflexión, sobre diversas temáticas como el medio ambiente, los derechos humanos, la salud. Nos gusta colaborar con otras organizaciones o colectivos e ir a lugares de interés.