De los múltiples acontecimientos que sucedieron a lo largo de la Guerra Fría, el complejo y pocas veces pacífico proceso de descolonización de África y el Sureste de Asia marcó un importante periodo de enfrentamiento entre las superpotencias, pues cada una buscó incorporar a las nuevas naciones dentro de su órbita de poder, mediante recursos económicos, militares, diplomáticos o de intervención directa, como el caso presentado en el texto anterior de la Guerra de Corea (1950-1953), o la guerra de Vietnam (1955-1975), por mencionar solamente algunos.