Aunque no es nuevo exigirles respeto y un uso responsable de sus voces a las personas que gozan de cierta fama, una búsqueda rápida muestra como la frase “cultura de la cancelación” tomó fuerza a finales del 2017 entre los usuarios de Twitter, y ha crecido en popularidad durante esta pandemia que nos mantiene interactuando a través de nuestras pantallas.