Estudios culturales: el sujeto marginal del noreste contemporáneo
El miércoles 10 de septiembre se llevó a cabo la primera sesión del Seminario de Estudios de Género en un recinto de la dirección de la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de Nuevo León. Miembros del grupo de investigación de Estudios Literarios del Colegio de Letras Mexicanas y Letras Hispánicas de esta universidad presentaron adelantos de los trabajos que actualmente realizan desde esta perspectiva de estudio.
Comenzó la sesión el maestro Manuel Santiago Herrera Martínez, catedrático especializado en cultura regional y literatura mexicana, con la presentación de su trabajo enfocado en la obra de la escritora judeomexicana, Margo Glantz, específicamente a partir de la novela titulada Las genealogías (1998). En ella se descubre la reconstrucción geográfica de la identidad judía, la influencia cultural de la identidad judeomexicana y el uso de los géneros prófugos, es decir, constructos anteriormente reservados para géneros periodísticos o de divulgación científica, ahora utilizados en textos literarios mediante la fusión de formas literarias y la dilusión de fronteras gerenacionales. Así, una novela es al mismo tiempo un texto antropológico, de divulgación y un documento para la historiografía, sobre todo debido a sus datos étnicos. Herrera Martínez comenta que algunas de las utilidades de esta ambigüedad estilística consiste en el fortalecimiento de la noción de comunidad. Otro de los aspectos fundamentales que el maestro destaca en la obra de Margo Glantz es la idea del cuerpo como herramienta social y política. También menciona al “testigo vicario”, es decir, un testigo empático tan recurrente en la literatura collage, por nombrar algunas de las tendencias literarias híbridas que se han trabajado desde el nacimiento, auge y decaimiento de las vanguardias a mediados del siglo veinte.
A continuación, tomó la palabra la doctora María Eugenia Flores Treviño, especialista en lingüística. Ella compartió parte de sus investigaciones enfocadas en el lenguaje de las mujeres desde la perspectiva literaria con base en la novela Álbum de familia (1985), de Rosario Castellanos. Aprovechó su intervención para mencionar, a pesar de la precariedad del tiempo, sus adelantos en la investigación de discursos de género en la expresión oral, el lenguaje académico y el sexismo normalizado en el habla cotidiana. Sus investigaciones se enfocan en el uso de la ironía y la construcción de género, sobre todo a partir de la adjetivación en el habla cotidiana de la ciudad de Monterrey y el área metropolitana, descubriendo la casi increíble ingenuidad de muchas mujeres universitarias y de grados de estudios superiores en la actualidad, las cuales aún conciben la posesión corporal como medio de empoderamiento ideológico en el terreno social.
Para finalizar tomó la palabra la coordinadora interina del Colegio de Letras, la maestra Tzitel Pérez Aguirre, cuyo tema se enfocó en el estudio semiótico de la voz femenina en la poética de Enriqueta Ochoa. Poeta oriunda de Torreón, Coahuila, y contemporánea de Rosario Castellanos, Jaime Sabines y Dolores Castro, aunque menos celebrada por sus contemporáneos quizás por su carácter periférico y subversivo que la orilla a sufrir la censura de su obra y la excomunión por parte de la Iglesia Católica. Pérez Aguirre, además, encuentra en la obra de Enriqueta Ochoa, a partir del poema “Las vírgenes terrestres” y “El retorno de Electra”, un ejemplo de las teorías de Julia Cristera y Hélène Cixous, quienes aseguran que no existe una literatura o lenguaje femenino o masculino sino que esta concepción se construye a partir de la perspectiva del emisor del discurso.
La coordinadora dio por finalizada la intervención de los participantes y continuó la sesión de preguntas y respuestas, donde pudimos ver un genuino interés por parte de los pocos asistentes, la mayoría estudiantes acarreados de las clases que los profesores no dieron debido a su participación en el evento, lo cual descubre los graves problemas de desinterés, letargo estudiantil y falta de promoción de eventos que desde hace años son lugar común en la facultad de esta institución.
Si acaso la poca relevancia y difusión que se le da a eventos como éste tiene que ver con la desinformación o desinterés de los estudiantes o altos mandos administrativos, tal panorama sólo acentúa la necesidad de invertir recursos y esfuerzo en la investigación de estudios culturales y de género, necesarios para encaminar a la sociedad regiomontana, comenzando por una de sus máximas casas de estudios, hacia el redescubrimiento humanista tan relegado en pos de los intereses pragmáticos y utilitaristas de esta sociedad industrial. Esperamos que esté cercano el día en que éste y no otros eventos, sobre todo de carácter proselitista, puedan llenar con una genuina audiencia espacios públicos accesibles, como el auditorio de la facultad en vez de verse relegados a las profundidades, pocas veces visitadas, de la Universidad, a donde ningún estudiante llegaría por curiosidad, menos por accidente.
El Seminario de Estudios de Género es uno de los enfoques de análisis dados por el Cuerpo Académico de Literatura, grupo integrado por la doctora Dalina Flores Hilerio, Ludivina Cantú Ortiz y Rosa María Gutiérrez García, y en esta primera ocasión, por alumnos y profesores invitados del cuerpo académico de la Facultad de Filosofía y Letras de la UANL. La siguiente sesión será el lunes 20 de octubre, esperemos que en un recinto más accesible. Con el objetivo de conocer y aplicar la perspectiva de género a los estudios literarios, se hace la cordial invitación a asistir a la próxima sesión dirigida a estudiantes, profesores, estudiosos y visitantes interesados en literatura y las distintas formas de analizarla.