Tierra Adentro
Jorge Satorre

«Farabeuf», 2015. Jorge Satorre. ↑

Al soltar sus últimos pétalos, la cabeza de la flor se hincha. La adormidera Papaver somniferum se encuentra lista entonces para recibir los cortes. Por sus heridas exuda un líquido blanquecino, una resina que al secarse se vuelve marrón. Al raspar la costra seca el ritual termina: opio en estado puro. La cabeza de la adormidera y la cabeza del ejecutado se yerguen sobre el horizonte, el viento las mueve suavemente mientras esperan el sacrificio. No hay arte que no provenga del corte. En el principio todo estaba desgajado, luego vino el orden, los órganos, las semillas, el cuerpo, la planta. Entonces sobrevino el corte, el flujo, el derramamiento. La propia resina del opio será cortada, machacada, vuelta polvo para que pueda diluirse en agua y aspirarse en la pipa; el hombre será ejecutado y sus entrañas formarán un collage de miembros sobre una canasta, la foto de esos cortes se volverá literatura. Cortar no es lo mismo que romper o desmembrar. El corte requiere técnica: es arte. El verdugo no mira al ejecutado como persona, ahora es lienzo. Los mil cortes deben ser precisos para no dañar órganos vitales y cada uno debe ser más horrendo, más exacto, más doloroso. Mi padre es cirujano; como el verdugo, conoce todas las posibilidades del corte, la diferencia entre ambos es el lugar de trabajo: el quirófano y la plaza, lo público y lo privado. Quizá otra es que mi padre cose después, el verdugo sólo corta y apila; por eso Farabeuf no habla la lengua del médico sino la del verdugo, por eso no habla sino por las palabras del escritor. ¿No compartimos Elizondo y yo esa atracción mórbida y secreta por los cuerpos abiertos? ¿Acaso no decidimos no estudiar medicina porque no nos atraía coser sino cortar? ¿Será que esa única diferencia nos convierte en médicos o escritores? Parece una paradoja que el opio provenga de lo que podría ser la sangre de la planta y la muerte por mil cortes se preceda por la ingesta del opio, cada corte es un ritual, cada ritual anuncia un corte.