Tierra Adentro
Portada de la revista Jñatrjo

La cultura jñatrjo a la que pertenezco, se encuentra en una región constituida por trece municipios del noroeste del estado de México: San Felipe del Progreso, Ixtlahuaca, Atlacomulco, Temascalcingo, Villa Victoria, El Oro, Jocotitlán, Villa de Allende, Donato Guerra, Jiquipilco, Ixtapan del Oro, Almoloya de Juárez y Valle de Bravo, y el ayuntamiento de Zitácuaro, en Michoacán. Esta zona, que forma parte de la Sierra Madre Occidental, ha estado habitada por los mazahuas desde la época prehispánica, aunque hasta la colonia era conocida con el nombre de Mazahuacán; de acuerdo con Nájera: “el Códice Mendocino al referirse al Mazahuacán indica que la población principal se encontraba en Xocotitlán y que los habitantes se dedicaban  a la cacería de venados (1970:16 citado en Figueroa p. 23).  De ahí, la denominación del mazahua como “la gente del venado” o “los que hablamos la lengua”. Es también, una de las cinco lenguas indígenas que se hablan en el estado de México. 1

El fenómeno migratorio ha hecho que hombres y mujeres crucen fronteras locales, de la comunidad al municipio o vayan más lejos al ubicarse en otras ciudades del país o en Estados Unidos y Canadá, en la búsqueda de mejores condiciones de vida para ellos y sus familias. Soy hija de padres migrantes que se establecieron en oficios diversos en la Ciudad de México. El sentir(se) mazahua creció con la añoranza de regresar a la milpa, a las montañas, a los bosques de pinos y oyameles, al olor de ocotes encendidos, al calor del fogón, a la celebración de fiestas con nuestra gente. En años recientes, he volcado mis energías al estudio de las lenguas y las literaturas indígenas contemporáneas como una búsqueda de identidad y pertenencia. La creación literaria en primera lengua (indígena – madre) es una urgencia, una propia e inmediata necesidad; ver al mundo en otras formas. “Es el camino, como lo menciona Margarita León, poeta hñähñu, de vuelta a casa de los abuelos, de los padres; a la nuestra” (2019:11).

Junto a mi madre Margarita Cruz y mis hermanas Guadalupe y Adriana; y mi padre y mi hermano mayor ya fallecidos, Andrés Bautista Santos (1938-2007), hombre campesino y migrante y Andrés Bautista Cruz (1965-2021), cuyo deceso por covid-19 nos lastimó amarga y dolorosamente como a cientos de personas que han perdido algún familiar durante esta pandemia. Mi hermano fue el primero en nuestra familia en obtener un título universitario. Se desempeñó profesionalmente como abogado agrario y fue uno de los fundadores distinguidos de la Procuraduría Agraria; y desde ahí acompañó a campesinos de todo el país, en los procesos de seguridad jurídica librándolos del despojo de sus tierras. Junto a los miembros de mi familia, hemos reconstruido la casa de nuestros ancestros, Casa Azul –con su milpa y su oratorio, que se ubica en las tierras altas y frías de la comunidad de San José Rioyos Buenavista, en el municipio de San Felipe del Progreso.

El pueblo mazahua está próximo a la celebración Nu mburú kjé’é jñatrjo; en San José Rioyos, el inicio del año mazahua en sincronía con el festejo católico a San José, nuestro santo patrono, se realiza una serie de ritos vinculados con el inicio del ciclo agrícola el día 19 de marzo, así como una celebración eclesiástica en la parroquia de la comunidad. He deseado pensar este texto como una reflexión acerca de los esfuerzos de hombres y mujeres que trabajan con la escritura mazahua como ese fuego nuevo que reaviva la palabra y la convierte en enseñanza y en poesía. También para presentar los resultados de dos significativas convocatorias “Ts’ina jens’e” /Madre cielo” y “Ri jñatrjogo/“Soy mazahua” emitidas por la Agrupación de Escritores Mazahuas.

 

 […]Na guezhiji yo na kjuana ñe yo nazoo  […]Se están zurciendo realidades y fantasías
Xëk’ïji yo kjiñine nana jomï. desmedajando la memoria de la tierra.
Kja Chajñiñi kjaji mbaxkua, tohjoji, El pueblo grande está de fiesta, canta,
kjanu jueximi ye kjïxïmï ñe yo k’uartr’ï. su voz estalla en hilos y colores.
                                  Jña’a yo g’uezhiji                        Palabras en bordado
Fausto Guadarrama, poeta mazahua (2020:218)

 

I. Zojña jñatjo/Poesía mazahua

La poesía en lenguas indígenas varía de una región a otra en relación con las lenguas en que este género literario, en su dimensión escrita, se ha venido cultivando en los más recientes años. Algunas tienen un considerable número de hablantes, o bien, un alto grado de prestigio lingüístico que les ha permitido desarrollar su propia tradición literaria. Es importante destacar que se trata de una escritura bilingüe, en una lengua indígena y en español, traducida por el propio escritor. En este sentido, la producción poética en lengua mazahua es escasa y su difusión es mínima. No obstante, la enorme riqueza de la tradición oral, así como en otros saberes comunitarios que son fundamento de la cosmogonía mazahua.

Si bien, el empleo de estas lenguas ha estado restringido al ámbito familiar y comunitario, a partir del involucramiento de los pueblos indígenas en la defensa de sus derechos, su uso se convirtió en una bandera de resistencia lingüística y de orgullo étnico. “Las lenguas son ahora arma y puente”, comenta Elisa Ramírez Castañeda: “Paradójicamente, la oralidad es resguardada por la escritura; surge como una nueva memoria, como un ejercicio para recuperar los espacios robados a las lenguas y a la tradición oral” (2017: s/p).

Sin embargo, este proceso de transición entre la oralidad y la escritura ha sido muy complejo para el pueblo mazahua, donde las condiciones de marginación social, política y económica sumadas a la migración, han mermado el desarrollo de políticas lingüísticas y de educación bilingüe, e inclusive se ha excluido la participación a los hablantes en la toma de decisiones acerca de la normalización de la escritura mazahua.2

Así, los primeros exponentes de poesía expresada mediante la escritura alfabética  aparecen a principios de la década de los años noventa. Y está vinculada a la conformación de maestros de educación básica y promotores bilingües en las comunidades mazahuas. Este factor educativo detonó una incipiente generación de estudiosos de la cultura y la lengua así como poetas en lengua mazahua.

Abro un paréntesis para comentar que existen varias investigaciones académicas acerca del pueblo mazahua, su cultura y su lengua y la migración desde una visión externa. Como el célebre título Indígenas en la Ciudad de México. El caso de la Marías (1979) de Lourdes Arizpe; o bien Identidad, género y relaciones interétnicas, Mazahuas en la Ciudad de México (2005) de Cristina Oehmichen Bazán; y la voluminosa investigación de Michel Knapp, Doctrina y enseñanza en lengua mazahua: Estudio filológico y edición interlineal del texto bilingüe de Nájera Yanguas/Mazahua (2013), un valioso aporte para la filología mazahua. Con este estudio, el lingüista se doctoró (2011) en El Colegio de México y obtuvo por esta investigación el Premio Wigberto Jiménez Moreno (INAH) para tesis doctoral de lingüística (2012) (2013:09). Sin duda, estos títulos como otros más que actualmente se elaborando en centros e institutos de investigación conforman ya un corpus para la historia del pueblo mazahua desde la antropología, la sociología y los estudios lingüísticos.

Así en los inicios de los años noventa, los hablantes mazahuas comenzarán a involucrarse de manera más directa con el estudio de su lengua, su escritura y en su caso, con la poesía. Tres de los más destacados representantes de este período son: Esteban Bartolomé Segundo Romero (San Pedro Potla, Temascalingo, edo. de México, 1951), profesor normalista y antropólogo social. Tallerista en lengua mazahua y creación literaria y traductor. Entre sus obras están Sjechjo/Bebida de maíz fermentado (1995); Diccionario mazahua-español (1996); En el cruce de caminos. Etnografía mazahua (2014); Las serpientes. Entre el relato y la memoria del imaginario colectivo mazahua/Teetjo ñaatjo jñaatjo – mazahua (2016) y Antología bilingüe de cuentos mazahuas. Poemas suyos se han publicado en las antologías Insurrección de las Palabras (La Jornada 2018) y Zojña jañatjo/Poesía mazahua (Literalia 2019).

 

A xes’e mboxkï xi’dyo, Sobre copos de algodón,
nuk’a ni maa ni ñ’eje nunu zana; en vaivenes de luna,
ñ’ïnï a xïtjï nu ngoxti, mece detrás del balcón,
nujyo xut’i: yo ts’iseje. a sus hijas: las estrellitas.
 
Ñanguad’iji, ñanguad’iji, ts’ingomï, Corran, corran, nubecitas,
ji ma ndenpa ri sat’aji nuk’a mark´ïji jamás acudan tarde a la cita;
ximiji ndeje nzo ya ri zók’ïji, derramen el vital líquido,
k’a tjaja yo juajmï. sobre los surcos del milpar.
[…] […]
 
                                  Yo ts’igomï Las nubecitas
Esteban Bartolomé Segundo Romero (2019: 46)

 

Fausto Guadarrama López (San Felipe del Progreso, estado de Méx., 1964), profesor de lengua mazahua en la Universidad Intercultural del Estado de México, su obra poética se encuentra publicada en varias revistas Nuni, de ELIAC y antologías como México: diversas lenguas una sola nación, tomo I Poesía (ELIAC, 2008); Insurrección de las Palabras (La Jornada 2018) y Caleidoscopio Verbal. Lenguas y Literaturas Originarias (2020). Cuenta con dos poemarios La voz de corazón y Male Albina en Amanecer/Ra Jyasï. Ha participado en diversos talleres literarios en la Ciudad de México, Pátzcuaro, Mich., y Bacalar, Quintana Roo. Ha sido presidente del Consejo Directivo de la Asociación de Escritores en Lenguas Indígenas, ELIAC.

 

Nu in dyokjobe un masi ri nego El amigo que más he amado
Sido k’ï mimitrjo a ngumï Sigue viviendo en casa
Zok’ï ma ra jyasï Llama al amanecer
Kjanu k’ich’i a mbo’o Y entra por el tejado
Jotrjo ga nzhód’ï kja tr’azaa. Con agilidad se desliza por la cumbrera.
Jyezi ra sërëgo, kja xakjï in dyego Me deja tocarlo, cosquillean mis manos
Kja e pa’a k’ï p’ëd’ë y mojmï A veces hace travesuras y rompe trastos
Nzayegob’e ri chjeñebe na punkjï. Juntos reímos hasta vaciarnos.
Ro k’os’ï texe kja i nzeronu Lo he untado en mi cuerpo
Ngek’ua dya ra zëk’ï yo dyéte Para exorcizar la maldad que hay en otras miradas
Ro ñonïb’e ñeje ru bech’ibe He comido y bebido con él
Texe yo jñoñï yo d’ak’ïbe zets’i. Los deliciosos manjares de la vida.
Yo keme un paa ri mimitrjob’e El resto del día lo pasamos en el suelo
Ri yepe ri mamïb’e k’ïbe zetsí. Reafirmando nuestra amistad eterna
Ngejedya d’a tr’ eñe k’ï ri eñeb’e Este es un juego secreto que tenemos
Dya jñus’ï kja d’a xiskuama No está registrado en ninguna parte
Ma kjokjo r anee ra mbarïnu Cuando alguien intenta descubrirlo
Angeze ra d’ak’ï kja nrrïngumï, ra maa Él salta por la pared, huye pícaramente.
Ny dadyo paa yepe k’ï mapjï. Al día siguiente vuelve a llamar.
                                     
                                       Ne jyarï El Sol
Fausto Guadarrama (2020:219)

 

Rufino Benítez Reyna (Zitácuaro, Mich.) Estudió en la Universidad Pedagógica Nacional, sede Ixtlahuaca. Es profesor de educación indígena, investigador y autor del Vocabulario práctico bilingüe mazahua-español (INI, 2002), (INALI, 2017) y coordinó Chapukjú mbaxua, jojña, nojo ñe mbezhe jñatjo/Antología de Fiesta, poesía, canto y cuento en lenguas mazahua (1998) y reeditada (2000). Esta recopilación de la tradición oral está escrita en mazahua con una propuesta específica de escritura por parte del autor para la segunda edición. Ambos materiales representan un apoyo didáctico y de consulta para los hablantes y, sobre todo, aporta registros lingüísticos de las dos variantes del idioma que se hablan tanto en el estado de México como en Michoacán.

La educación formal y la profesionalización de las jóvenes generaciones han logrado conformar un nuevo capital cultural entre los mazahuas, hoy estos jóvenes se han ido insertado en espacios culturales como artistas visuales, comunicólogos, músicos, raperos, entre otras profesiones vinculadas con el arte. Aunado a las condiciones actuales de producción artística, la creación de apoyos institucionales como becas y premios nacionales e internacionales, los espacios de difusión y las publicaciones, así como las acciones políticas y culturales emprendidas por ellos mismos dentro de sus comunidades.

En este sentido, Francisco Antonio León Cuervo (Santa Ana Nichi, San Felipe del Progreso, edo. de Méx., 1987), proviene de una educación literaria formal al ser egresado de la licenciatura en Lengua y Cultura de la Universidad Intercultural del Estado de México (UIEM). Y ha destacado al incursionar en la narrativa de manera exitosa, ya que es el primer escritor en lengua mazahua en obtener el Premio de Literaturas Indígenas de América, PLIA (2018), uno de los reconocimientos más prestigiosos en el ámbito de las letras indígenas de América, que se otorga anualmente en la Feria Internacional del Libro en Guadalajara. Gabriel Pacheco, presidente de la Comisión Interinstitucional del Premio, comentó que “la escritura en lengua mazahua, siendo una de las menos extendidas y con menor tradición literaria escrita, haya producido una obra de tan alto nivel que puede parangonarse con cualquier obra de la literatura universal” (2018:10).

Nu pama pama nzhogú/El eterno retorno es el título de la novela donde se relatan las peripecias de Xuba, un hombre mazahua que se dedica a extraer la raíz del zacatón, y que modificará sustancialmente su vida a partir del encuentro con una mujer-sirena. La enfermedad, el hambre y la pobreza también están presentes, así como la aculturación del pueblo mazahua durante el período latifundista del gobierno de Porfirio Díaz (2020 s/n).

León Cuervo también es poeta, entre su obra se encuentra el poemario Yo jomú nu ú’ú/Las tierras del dolor (UDG, 2019), así como la publicación de varios poemas en diversas antologías como Insurrección de las palabras (La Jornada, 2018); Xochitlajtoli, (Círculo de Poesía, 2019), Zojña Jñatjo/Poesía Mazahua (Literatelia, 2019), América en ocho lenguas (UDG, 2019), entre otras. Ha traducido a la lengua mazahua el poemario Cenizas de un flor/ Yo b’osibi na nrájná del autor Xhevdet Bajraj (Ediciones Botas, 2019). Ha sido becario del FONCA del Programa Jóvenes Creadores 2018-2019. Pertenece al grupo académico para la normalización de la escritura mazahua. Actualmente, es presidente de la Agrupación de Escritores Mazahuas y director de la revista Nu jñiñi jñatjo/El pueblo mazahua, ahora Jñatrjo. A partir de su trabajo se ha despertado el interés de algunos jóvenes maestros por el análisis y la discusión de la revitalización de la lengua y, a través de esta agrupación, con quienes actualmente revisa aspectos vinculados con la normalización de la escritura y la literatura mazahua.

Ha colaborado con cuentos y poemas en revistas impresas y electrónicas como Sinfín, Círculo de Poesía y Ojarasca. Ha impartido diversos talleres de creación literaria y ha participado en diversos recitales de narrativa y poesía. León Cuervo está aportando de manera permanente con su talento una obra que renueva y enriquece la literatura en mazahua y en español.

II. Agrupación de Escritores Mazahuas

Los intelectuales indígenas, comenta Natividad Gutiérrez Chong, son una minoría numérica de mujeres y hombres entregados al rescate, fortalecimiento, creación, difusión de sus ideas emanadas de sus pueblos históricos en todos los formatos posibles desde las artes plásticas hasta la literatura. Sus creaciones por medio de la palabra escrita o la oralidad muestran la manera en que se ven a sí mismos y cómo quieren ser vistos por los otros. […] Los intelectuales indígenas juegan un papel fundamental para su futuro. Son los puentes que vinculan el pasado con el presente. Son los que conectan el origen con el destino. El pasado es muy importante para la memoria de cualquier pueblo o nación, pero para el pueblo indígena es su razón de existir, es la fuente indiscutible de origen. […] El papel del intelectual es poner ese pasado a interactuar con ideas del mundo actual. Son parte de la modernidad, de la aldea global. No viven en aislamiento, antes bien, tienen iniciativas políticas de mucho calado, fundan revistas, asociaciones lingüísticas, usan los medios de comunicación. Son atentos observadores del mundo moderno, porque ellos son los puentes para comunicar a sus pueblos con el mundo. Nunca traicionan sus orígenes ni se avergüenzan de ellos (2021: s/p).

Retomo estas líneas y mi subrayado en cursivas para vincular –muy sucintamente– el origen y el estado actual de la Agrupación de Escritores Mazahuas, quien al inicio de este año (2021), emitió en su facebook un par de convocatorias “Ts’ina jens’e”/“Madre cielo” y “Ri jñatrjogo”/“Soy mazahua” que buscan la visibilizar a las mujeres mazahuas a través de un reconocimiento a su trabajo cotidiano en la difusión de las costumbres y tradiciones, así como un concurso de poesía en lengua mazahua dirigido a toda su población.

Escritores Mazahuas es una agrupación independiente y autogestiva sin fines de lucro ni intereses políticos, que trabaja colectivamente en proyectos que promueven el uso de la lengua y la literatura mazahua.

Portada de la revista Jñatrjo

Portada de la revista Jñatrjo

 

 

La siguiente cronología destaca las acciones que ha llevado a cabo desde su fundación (Valle, E. pp. 1-18):

  • 2014 Su primer impulsor fue Esteban Bartolomé Segundo Romero quien con el respaldo de algunas instituciones culturales del Estado de México convocaron a escritores e intelectuales indígenas de los diferentes grupos del Estado de México a reunirse con el fin de crear una agrupación de escritores. Entre los integrantes se encontraban el poeta mazahua Fausto Guadarrama López; la maestra Bonifacia Cid, docente y directiva del Departamento de Educación Indígena del Estado de México; la maestra de origen tlahuica, Elpidia Reynoso; el escritor náhuatl Crispín Amador Ramírez; el profesor del Instituto Nacional para la Educación de los Adultos (INEA) y escritor mazahua Juan Ancelmo González; la maestra otomí y docente de la Universidad Intercultural del Estado de México (UIEM) Petra Benítez Navarrete; entre otras personas de los diferentes grupos originarios del Estado de México, varios de ellos reconocidos impulsores de la cultura de sus pueblos indígenas.
  • 2016 La Agrupación invitó a mazahuas de Michoacán como el profesor e investigador Rufino Benítez; la profesora y cantante Felisa Benítez; la profesora y cantante María Benítez y el profesor Betuel Medina Vega, así como otras personas de diferentes regiones del estado de México, entre ellos Francisco Antonio León Cuervo. Se realizó un taller de expresión oral gestionado con la Secretaría de Cultura del Estado de México. Se propuso un proyecto para realizar antología literaria.
  • 2017 Descendió el número de integrantes quedando únicamente mazahuas del Estado de México y Michoacán. Entre ellos las maestras Felisa, Mari y Bonifacia; y los maestros Esteban, Betuel, Juan, Germán y Francisco. Estos integrantes conforman el 25 de marzo de 2017 la organización que en adelante se denominó Escritores Mazahuas. Se pospone la antología. Se inició la difusión por medios digitales a través de la creación en Facebook de Escritores Mazahuas. Se publicaron poemas bilingües acompañados de alguna fotografía.
  • 2018 Francisco Antonio detectó, mientras trascribía la novela Nu pama pama nzhogú/El eterno retorno, que el sistema de 2015 que solían emplear para su escritura no era funcional para escribir más de diecisiete mil palabras sin que el texto se alterara, sumado a que escribir subrayando las vocales nasales era un proceso lento y laborioso. Estas circunstancias impulsaron a que Francisco Antonio en colaboración con algunos integrantes de la agrupación hicieran un llamado replantear los avances del sistema de escritura mazahua de 2015, generando una discusión sobre cómo escribir en mazahua.

Dicha discusión fue un vector importante en la historia de la Agrupación de Escritores Mazahuas porque se reflexionó en términos técnicos de trabajo, en la búsqueda por profesionalizar la escritura en mazahua, pero al mismo tiempo fue una detonante en la fractura de la primera generación de Escritores Mazahuas.

Francisco Antonio planteó la posibilidad de crear una revista digital cuyos contenidos estuvieran vinculados con el pueblo mazahua. Con acuerdo de todos los integrantes, se publicó la convocatoria para participar con textos y fotografías en febrero de 2018. El primer número de la revista Nu Jñiñi Jñatjo se publicó en junio de 2018 en el portal de internet del mismo nombre. A la fecha, existen seis números publicados de manera semestral, su convocatoria es abierta a la participación del pueblo mazahua.

El primer número alcanzó las 2500 descargas en México, Estados Unidos, Latinoamérica y algunas partes de Europa.

  • 2019 A finales de año se convocó a una reunión de integrantes de la agrupación para elegir a un nuevo presidente, las opciones eran tres, Germán Segundo, Juan Ancelmo y Francisco Antonio. A esta reunión asisten Susana Bautista Cruz y Flor Deyanira Jerónimo Estanislao, quienes en adelante llegan a sumar sus voces en los procesos creativos y de autogestión de la agrupación. De las tres propuestas, se elijé como presidente a Francisco Antonio.
  • Se establecieron vínculos con la Asociación Cultural Dummuiji, el proyecto Alas de la Palabra, el Festival de Lengua, Arte y Cultura Otomí (FLACO), la Universidad Intercultural del Estado de México (UIEM), la Universidad Pedagógica Nacional, Unidad Ixtlahuaca, la Escuela Normal de San Felipe del Progreso, la Escuela Normal de Atlacomulco, el grupo de escritores de Valle de Bravo, entre otras.

Anterior a la pandemia, la Agrupación organizaba reuniones presenciales, primero en la ciudad de Toluca, posteriormente, en febrero de 2019, la agrupación se “traslada a la Universidad Intercultural del Estado de México, en San Felipe del Progreso, con el objetivo de involucrar a los estudiantes y atraer una mayor cantidad de hablantes de la lengua mazahua” (Gobierno del Estado de México, Coordinación General de Comunicación Social, 2019). Desde finales de 2019 y en 2020 las reuniones se realizaron en el “Comedor Casa Blanca” ubicado en el centro de San Felipe del Progreso, Estado de México.

  • 2020 Escritores Mazahuas está integrado por Francisco Antonio León Cuervo, Germán Segundo Cárdenas, Juan Ancelmo González, Rufino Benítez Reyna, Susana Bautista Cruz, Flor Deyanira Jerónimo Estanislao, Elvira Escamilla Marín y Francisca Sámano González.
  • 2021 A inicio del año, se emitieron dos convocatorias “Ts’ina jens’e”/“Madre cielo” y “Ri jñatrjogo”/“Soy mazahua” para dar a conocer sus resultados en marzo y publicar en el poema ganador en plataformas digitales. Se publicó un calendario mazahua en las redes sociales y vídeos con poemas grabados en la voz de sus autores en conmemoración del día internacional de la lengua materna, 21 de febrero.

III. Convocatorias  “Ts’ina jens’e” y “Ri jñatrjogo”. Resultados

La Agrupación de Escritores Mazahuas emitió dos convocatorias con la finalidad de reconocer el trabajo cotidiano de aquellas mujeres mazahuas que conservan y difunden las costumbres y tradiciones que caracterizan al pueblo mazahua, bajo el nombre “Ts’ina jens’e”/ “Madre cielo”. En las bases se establecía que las candidatas podrían ser aquellas mujeres cuya edad rebasará los 50 años, sin importar su lugar de residencia. Las candidaturas podrían ser a título personal, por terceros, por organizaciones de la sociedad civil o por instituciones. Además de considerar diversas actividades ya fuera danzantes, alfareras, joyeras, artesanas, cocineras, parteras, médicas tradicionales, narradoras, etc. y cuya amplia trayectoria mereciera su reconocimiento. La candidata debía enviar su semblanza acompañada de fotografías del trabajo realizado con descripciones de sus actividades.

Felisa Benítez Reyna fue elegida por su destacada trayectoria con más de treinta años como docente en la enseñanza de la lengua jñatjo en diversas escuelas de educación básica del estado de Michoacán. Por esta actividad, el gobierno de esa entidad le entregó la Medalla “Maestro Rafael Ramírez” en 2018. También, se ha distinguido por contribuir a la difusión de la vestimenta portando con orgullo el traje de las mujeres mazahuas en la fiesta patronal del 2 de febrero; por ello obtuvo un segundo lugar en el Concurso de Indumentaria Tradicional de Ceremonias y Danzas, celebrado en el Tianguis Artesanal del Domingo de Ramos en Uruapan, Michoacán en 2016, entre otros reconocimientos. La Mtra. Benítez Reyna nació el 20 de noviembre de 1966 en la 1º manzana, el Rincón de Crescencio Morales, municipio de Zitácuaro, Michoacán.

Foto de Felisa Benítez Reyna

Foto de Felisa Benítez Reyna

 

La segunda convocatoria “Ri jñatrjogo”/ “Soy mazahua”, concurso de poesía en lengua mazahua. Las bases establecían el envío de un poema bilingüe escrito en mazahua y en español. El poema debería ser inédito, de tema, forma y extensión libre. Y para su redacción se podría utilizar cualquier sistema de escritura mazahua. Sin importar la edad y la residencia del autor. Además de enviarlo bajo un pseudónimo. El concurso se realizaría en dos fases. En la primera, los Escritores Mazahuas revisarían la correspondencia del poema en ambas lenguas y seleccionarían cinco poemas finalistas. En la segunda, dos escritores de reconocida trayectoria conformarían el jurado que determinaría el poema vencedor.

Escritores Mazahuas recibió 17 poemas escritos por once mujeres y seis hombres de los municipios de Atlacomulco, Ixtlahuaca, Jocotitlán, Temascalcingo, San Felipe del Progreso y Villa Victoria del estado de México.

El jurado integrado por Margarita León, poeta hñähñu, quien tiene estudios en Lectura y Escritura por la Universidad de Buenos Aires. Ha publicado narrativa y artículos sobre la poética originaria. Cuenta con un poemario Ya B’ospi/Cenizas (2019). Ha impartido talleres de creación poética; compiladora de Zojña jñatjo/Poesía mazahua (2019), entre otros. Y Héctor Martínez Rojas, editor de libros en lenguas originarias de México y director de Oralibrura Ediciones. Ambos jurados decidieron otorgar el premio al poema Nu b’ezo kja xorú / El hombre de la sombra de Lalo Casimiro.

Mediante una reunión de trabajo y conforme a los criterios establecidos por los escritores hablantes de la lengua jñatrjo-mazahua, tenemos a bien otorgar el premio del primer concurso de poesía Ri Jñatrjogo 2021 al poema El hombre de la sombra de Lalo Casimiro. Hemos priorizado la estructura y composición poética desde el jñatrjo-mazahua, lengua de origen, hemos analizado de igual forma aunque con menor escrutinio la traducción al español. Creemos que ambos poemas se sostienen uno al otro y que prevalece la calidad de la creación mazahua, así como el cuidado del poema llevado al español.

El hombre de la sombra es un llamado del ser, de afuera hacia dentro. Es la esperanza de una revelación que ya ha experimentado la voz poética, una voz de belleza esperanzadora, descriptiva, sencilla pero no simple. Nos hace mirar al sol cual reloj que marcará otro tiempo, el tiempo en el que podremos mirar todos los rostros, todos nuestros rostros. Es un llamado a la unidad del pueblo Jñatrjo.

Es un poema que nace puramente del pensamiento jñatrjo-mazahua, su estructura denota un dominio avanzado del idioma y a su vez nos deja ver imágenes sentidas desde otro universo, el universo original de una cultura que asoma su rostro al sol para iluminar las sombras. La emoción que deja en cada verso se apodera del lector, el último verso nos invita a suspirar hondo para dar paso a una agradable melancolía. 3

Eduardo Casimiro López nació en Atlacomulco, estado de Méx., 1977. Utilizó como seudónimo Lalo Casimiro. Es cantautor, compositor y escritor en lengua mazahua y español. Ha participado en diversos eventos culturales así como en programas radiofónicos, de televisión y canales de tv por internet. En su trayectoria musical obtuvo el primer lugar con “Lloran mis ojos” en el concurso la canción del año de la Unión de Grupos del Norte del Estado de México, 2015.

La agrupación de Escritores Mazahuas entregará los reconocimientos a ambos ganadores el sábado 20 de marzo en el “Comedor Casa Blanca” ubicado en el centro de San Felipe del Progreso, Estado de México. Fecha que coincide con Nu mburú kjé’é jñatrjo/el inicio del año mazahua.

Kja un jñii zana yo xepje zinzapjú k’a i tr’ejegojme nu mbexi na joo mbezhe, yo ch’itr’i tonjiaji mu ra nunji ka kjobú, nu d’adyo kjé’e jñatrjo o sájá mu ra pese yo nrrájná, pjurú nuk’ú mu tujmúji, ngeje nu mamú yo jñatrjo, mu ra tujmú ngeje tr’ob’ú, chüü ngek’ua ri yepe ri mimi.

En marzo las mariposas vuelan por nuestros bosques que comienzan a pintarse de verde, los niños se alegran al verlas pasar. El año nuevo mazahua ha llegado: comienza la siembra, se entierra la semilla para volver a vivir.

Escritores Mazahuas

Trad. de Francisco Antonio León Cuervo

 

*Agradecemos a Marcos Ávalos, editor de la revista Tierra Adentro, su generosa invitación para difundir los resultados de ambas convocatorias y la publicación del poema vencedor.

 

 

  1. El mazahua tiene dos variantes, el mazahua del oriente y el mazahua de occidente. Al mazahua de oriente sus hablantes lo conoce como jnatrjo, y al mazahua de occidente le dicen jnatjo. Ambos se hablan en el estado de México y en Michoacán. En el censo de 2010 se registró un total de 136, 717 hablantes de mazahua. Esta agrupación lingüística pertenece a la familia oto-mangue. Sus lenguas hermanas más cercanas son el otomí, el matlatzinca y el tlahuica. También se habla la lengua náhuatl. Ver: http://atlas.inpi.gob.mx/?page_id=1268
  2. Actualmente no existe una norma única en la escritura mazahua. Se utilizan mayormente dos sistemas de escritura, el de 1989 que fue un acuerdo de unificación del alfabeto mazahua. Posteriormente, el Instituto Nacional de Lenguas Indígenas (INALI) convocó a distintas instituciones a reuniones para el estudio y análisis de este acuerdo, los resultados dieron el sistema de escritura de 2015. La Agrupación de Escritores Mazahuas implementó su propio sistema de escritura.
  3. Dictamen firmado por Margarita León y Héctor Martínez Rojas, el día 28 de febrero de 2021.