En el último número de la revista Life hay varias páginas dedicadas a Octavio Paz y en una edición reciente de L’ Express, de París puede verse un largo artículo de Alain Jouffroy sobre el poeta mexicano.
Debo, primero que todo, al iniciar esta conferencia, pedir anticipadamente al auditorio perdón por una grave falta de urbanidad que a lo largo de toda ella voy repetidamente a cometer y que estoy cometiendo ya desde la primera palabra.