Tierra Adentro
Fotografía por Pixabay.

El viernes 3 de octubre, las lluvias prolongadas, aunque no intensas, evidenciaron la terrible planificación urbana de la ciudad de Monterrey, capital del Estado de Nuevo León. Trabajos de reconstrucción luego del huracán Alex, en 2010, y de aparente remodelación vial que se ha llevado a cabo los últimos tres años necesitaron un sólo día lluvioso para mostrar la falta de conciencia ecológica. El viernes, durante todo el día, la ciudad literalmente se sumergió en el caos ya que hubo encharcamientos, debido a la débil infraestructura para el tratamiento del agua de lluvia y drenaje en los cauces naturales del agua, lo que provocó embotellamientos desde la mañana hasta la tarde y el cierre de arterias principales; el deslave de un paso a desnivel recién construido en la zona sur de la ciudad y el desborde de un río, lo que resultó en daños a mil 262 viviendas y 13 escuelas.

Dos días antes de esta catástrofe, el miércoles 1 de octubre, casi como una profecía, se sostuvo en la Sala 11 del Museo de Arte Contemporáneo (MARCO) una mesa de diálogo titulada Humano… Nuestra relación con el entorno, precedida por el arquitecto Ricardo Padilla, cofundador del colectivo ambientalista Reforestación Extrema y responsable de proyectos de planificación urbana como El Semillero; el fotógrafo Alfredo de Stéfano, artista invitado en la exposición In/humano, que desde el 11 de julio y hasta el 2 de noviembre se exhibe en el museo, y Luis Madaria, productor de televisión cultural y experto en la reflexión sobre las periferias y el medioambiente.

Durante la charla se entretejieron una diversa variedad de perspectivas, sobre todo en torno a la conciencia del medio ambiente en el país, específicamente en la mancha urbana de la ciudad de Monterrey. En palabras del arquitecto Ricardo Padilla, la ciudad a principios del siglo XIX era una belleza en su entorno, ahora se corona como la ciudad más contaminada de México. En los últimos cuarenta años ha cuadruplicado su tamaño y existe un fenómeno único y devastador en América Latina: la densidad vehicular, que se traduce en dos vehículos por habitante, en una ciudad (mal) construida para conductores y con graves problemas en cuanto a distribución de la riqueza y transporte público. Hace falta cambiar la manera en que se perciben ciertas circunstancias, sobre todo la idea del “yo” en el mundo. El arquitecto comenta la urgencia de ampliar la percepción del “yo” a “yo y las circunstancias” para con ello comprender las situaciones desfavorables que desembocan en consecuencias concretas y contundentes para cada uno de nosotros como individuos.

Por otro lado, en la charla también se reflexionó sobre el contenido de la exposición In/humano y la creciente preocupación del tema ambientalista en distintos rubros del quehacer humano. A este respecto Luis Madaria recordó que la destrucción ecológica no es un tema nuevo, todo lo contrario. Recordó a Rachel Carson que a través de un texto titulado Silent Spring (Primavera silenciosa) marcó el nacimiento del discurso ambientalista. Madaria, gran conocedor de las periferias, menciona que en este ámbito hay gran calidad humana y sentido de comunidad que se ha perdido en las grandes urbes, provocando vulnerabilidad en la condición humana. Durante sus intervenciones reflexionó en torno al contenido de la actual exposición del MARCO y relacionó algunas de las piezas con películas que retratan el tema de medio ambiente, ser humano y el entorno, por ejemplo: 2001: Odisea del espacio (1968), de Stanley Kubrick, o la película animada Wall-E (2008) que a su parecer es una metáfora de la condición actual del planeta. Menciona cómo a partir de las piezas subyace el cambio evolutivo en la percepción de los seres humanos cuando éste era un ser frágil y vulnerable en la vastedad del mundo y ahora es un cazador, un destructor del entorno.

Alfredo de Stéfano, por su parte, relató su experiencia como artista enfocado sobre todo en la estética del desierto, del cual se siente atraído por su misterio y vastedad. Él lleva veinte años trabajando en una exposición titulada Tormenta de luz. Ha viajado por los desiertos de todo el planeta realizando un documental dirigido por Everardo González. Aprovechó el momento para mostrar imágenes y video de sus viajes por los desiertos, mostró un adelanto cuyas imágenes captan el lirismo romántico de esas inmensas latitudes y de algunos grupos humanos que lo habitan. Comentó que sus motivaciones personales están dirigidas hacia la manifestación de la vida y la muerte desde la estética de los desiertos. Por medio de su obra ejercita la reflexión subjetiva para mostrar la trascendencia del desierto, para él fascinante, ya que ha sido la cuna de la civilización. Para el fotógrafo, el desierto ostenta una “belleza sublime” que le valió la clasificación de “romántico posmoderno” que si bien podría ser acertada resonó de manera extraña en el recinto, debido, quizás, a la diversidad de connotaciones que las palabras “romántico” y “posmoderno” tienen en la actualidad.

La conversación, cuya pluralidad de temas y perspectivas apuntaban a prolongarse, suficiente como para hacer un congreso al respecto, tuvo que darse por terminada algo abruptamente. Se dio pie a una sesión de preguntas y respuestas.

El arquitecto Padilla mencionó la creciente necesidad de revalorizar el desarrollo vertical y no horizontal de las infraestructuras, como se ha llevado a cabo durante los últimos años, ya que de esta manera se está perdiendo territorio verde no urbano, así como espacio que antes era adecuado para la agricultura. En esta ronda también se mencionaron las carencias en cuanto a transporte urbano, cuyo desarrollo es vergonzoso, si se toma en cuenta que sólo hay dos líneas de metro y condiciones terribles de transporte público. Durante la charla, los tres participantes estuvieron de acuerdo en la necesidad de cambio respecto a la manera de concebirse a uno mismo como parte del todo; de las circunstancias; evolucionar para ser una sociedad empática y activa en la gestión de políticas públicas socialmente responsables.

Se extiende la invitación para acudir a la exposición In/humano que permanecerá hasta el 2 de noviembre. Se recuerda que la entrada al museo es gratuita los miércoles. También para los interesados en materia de ambiente en la ciudad de Monterrey aquí la liga a la asociación civil Reforestación Extrema. Durante la intervención del público, alguien entre los asistentes aventuró una predicción: que la ciudad de Monterrey tocará fondo, en aproximadamente cinco años, y que sólo ante la tragedia comenzaremos a tomar conciencia y buscar cambios reales en la gestión de políticas favorables para todos. Ojalá no tenga que ser así y que los habitantes de la ciudad podamos tomar conciencia a tiempo.

 


Autores
La redacción de Tierra Adentro trabaja para estimular, apoyar y difundir la obra de los escritores y artistas jóvenes de México.
nació en Monterrey, Nuevo León, México, 1991. Cursa actualmente estudios de Literatura Mexicana en la Facultad de Filosofía y Letras de la Universidad Autónoma de Nuevo León. Participó como ponente y creadora en los encuentros y congresos organizados por la Red Nacional de Estudiantes de Lingüística y Literatura (REDNELL) en D.F., Querétaro, Mérida y Tijuana ininterrumpidamente desde el 2010 al 2012. En febrero del 2013 ganó el Primer lugar en el Slam Poético 3.0: Sobrevivientes del 2012 y participó como jurado en el Slam Poético 4.0: Monterrey es un laberinto (junio 2013). Ha sido publicada en Puño y Letra (Monterrey, 2012), La regia cartonera (Monterrey 2014), Los bárbaros del norte (CONARTE 2014), el periódico Barrio Antiguo (Monterrey 2014) y la página de internet de Fuerzas Unidas por Nuestros Desaparecidos en México (FUNDEM 2014).