Svetlana Alexievich es una de esas autoras legendarias a causa de su enorme influencia en otros cronistas alrededor del mundo y por haber recibido el Premio Nobel de Literatura en Estocolmo en 2015.
Leer periódicos a diario, obtener datos duros para respaldar una investigación propia, agotar las pesquisas hasta esclarecer los hechos y las preguntas alrededor de ellos.