En cuanto me enteré que el huracán Delta amenazaba golpear con fuerza la península de Yucatán, al mismo tiempo que ordenaba en una aplicación veinte latas de atún, galletas de animalitos y dos veladoras, imprimí tu último libro de crónicas “El ajedrez es un juego tan siniestro y personal”, publicado recientemente por Los libros del perro.