¿De qué vive el tiempo? ¿De qué viven las historias? ¿De qué vivimos cuando pensamos en algo-más-allá, en lo que somos en el aquí-y-ahora? ¿De qué vive parte del sentido (que no es necesario conocer) de nuestras vidas? De muerte.
En los márgenes del orden, de la luz, de lo que se puede decir; debajo de la alfombra que pisamos al entrar a casa o entre las sábanas de la cama en la que dormimos, algo acecha.